«TU ELIGES LA BATALLA» (POST 135 DE INTELIGENCIA EMOCIONAL)»

Queridos amigos, el tema de hoy es “Tú eliges la batalla” y va dedicado a Pablo, Roxanna, Miguel y Zatara, quienes me pidieron el tema.

La vida no es sencilla, pero es hermosa, en ella encontramos miles de motivaciones para desarrollarnos, servir y sobre todo trascender. Sin embargo, el ser humano tiene la capacidad de elegir los asuntos por los que vale la pena luchar, esforzarse y hasta sacrificarse para llegar a un bien.

No siempre el hombre tiene la capacidad de asumir que existen situaciones en las que da lo mejor de sí y no vale la pena, inmolándose casi en fines u utopías que solo lo llenan de desasosiego y dolor .

Por ello, veamos desde Zéfiro qué batallas son por las que vale la pena luchar y cuales no.

1.- No vale la pena luchar por situaciones donde solo te esfuerzas tú: Si por ejemplo tienes metas y ellas dependen del quehacer de grupos y sientes que no recibes el apoyo adecuado, no existe empatía y las personas solo colocan obstáculos y conflicto para que las cosas sigan de manera correcta, no puedes luchar porque todos cambien como lo esperas, no puedes ir contra corriente porque te desgastas, te enfermas y sobre todo se te va la vida en el intento.

Lo correcto aquí seria darte cuenta de tus fines, del tipo de personas con las que estas lidiando y si la hostilidad es grande buscar que tu meta se lleve a cabo con otro equipo o por tu cuenta, crear las condiciones adecuadas para viabilizar los caminos sin atropellos de nadie. Insistir y amargarte ante personalidades caóticas, conflictivas o poco empeñosas solo hará que tú te cargues con toda la responsabilidad y encima te quejes de ello.

2.- Nadie puede cambiar por ti y para ti: A nivel afectivo muchas personas se embarcan en relaciones donde notan que no están de acuerdo con muchas actitudes de la pareja y exigen un cambio. Una cosa son los acuerdos que se hagan en pareja y otraesperar algo que la pareja no es capaz de hacer o dar porque simplemente no le nace, no puede o no lo aprendió jamás. Por ejemplo, no puedes esperar que tus valores y principios sean iguales, pero si estás en capacidad de darte cuenta si esa persona posee valores o no; entonces puedes elegir lo que quieres y no quieres para tu vida.

Es tan importante ser racional así duela en muchos aspectos de la vida porque ello permitirá que decidas luchar por algo que vale la pena y alejarte o cortar con situaciones que solo te roban la paz y arrastran hacia el dolor absurdo.

Si buscas la sinceridad y la responsabilidad, así como la bondad es complicado tener empatía con personas que están acostumbrados a no serlo. Por tanto, no existirá esa coincidencia en valores que sirve de cimiento para que la admiración y el sentimiento profundo crezcan.

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3.- No puedes vivir pendiente solo de lo que esperan de ti: Por dar puedes correr el peligro de olvidarte de ti mismo. Ser generoso, compasivo (a) y servicial es importante y nos acerca a la sabiduría; pero no por ello puedes ni debes sacrificar todo lo que anhelas, tus metas y sobre todo tu paz. De modo que si solo te preocupas por los logros de los demás y dejas de mirarte pasará el tiempo y aquellas cosas que más querías se habrán ido de tus manos causándote desazón.

Es importante que desarrolles espacios para lo que te de felicidad de hacer, elegir actividades o entretenimiento donde seas tú mismo (a) y así le des a tu alma la alegría y bienestar que necesita para ser estable.

4.- Por terquedad, irracionalidad, soberbia y también por no asumir con humildad los errores se asumen batalla cuyos resultados serán nefastos. Recuerda que solo vale la pena luchar por aquellas cosas que engrandecerán tu alma y si los caminos te exigen sacrificio los tomarás con gusto y sin quejarte porque sabes que las intenciones son las mejores y porque llevan impresos valores y también deseo de darte y servir.

5.- No te quejes si sientes que diste mucho por algo y no fuiste correspondido (a) como esperabas porque tú elegiste el camino y es imposible esperar demasiado de los demás, cada quien es como es y solo tras acuerdos y compromisos dialogando se logran beneficios para quienes estén involucrados.

No puedes luchar por ejemplo con aceptar estilos de vida que no van con tu esencia, con sacrificar tus principios, tu integridad y en lo que crees por otros o por creer que con ello serás reconocido (a) . Y queda aceptar con racionalidad que a veces las mejores batallas se ganan en tiempos adecuados y no cuando lo pensaste o quisiste, y como dicenlos gitanos:” si aquello es para ti, será para ti porque lo que está escrito, está escrito”, pero quizá cuando lo merezcas, quizá cuando estés preparado para recibir (porque hasta para ello hay que estar preparado) y solo quienes no flaquean en lo que son y hacia donde van tienen esa capacidad renovándose constantemente.

6.- El dolor no solo es por fatalidad, también llega por elección y por circunstancias ajenas a ti. En todo caso, no es posible librarse de lo imprevisto, pero sí de aquello que sabes generará consecuencias dañinas para tu mente, alma y espíritu y recorras los caminos que recorras, mantenerte en equilibrio interior es lo más saludable.

La batalla más importante que debes librar es contigo mismo porque recuerda que la línea divisoria entre lo correcto e incorrecto es fina y solo las personas valientes, con fe y convicción saben librarse de los senderos oscuros y si para ello deben sacrificar algo lo harán sin quejarse. No nacimos para ser infelices ni vale la pena decir que se lucha solo para dar gusto a otros dejando de ser uno mismo (a); por tanto lo que seas será lo que quieras ser.

Ahora les dejo esta bellísima canción para coleccionistas y conocedores. Espero los acompañe y les agrade

Que tengan un día lleno de paz y decidan luchar por ser mejores tomando los valores, fe y principios, así como la generosidad como aliados

Manjarí (bendiciones)