Vivas lo que vivas, no le hagas a nadie lo que no te gustaría que te hagan.

Vivas lo que vivas, no le hagas a nadie lo que no te gustaría que te hagan. Y acepta con humildad la esencia de cada quien, entendiendo que cuanto más lejos está espiritualmente alguien de los valores que enseña el creador, se perdió, se vistió de ego, errores conscientes y ausencia de conciencia.
Y agradece a la divinidad el hecho de tener cerca de ti a la gente que realmente te hace bien y jamás haría algo que te dañe y muy lejos a la incorrecta; porque nadie es perfecto, pero los seres necios no escuchan, no ven, no entienden razones y solo responden a sus caprichos, doble moral y necesidad de bajezas que les pide la cobardía.

Y porque justo es el creador, el tiempo es siempre aliado y muro infranqueable ante todos aquellos que viven solo guiados por su egoísmo y por el modo y manera en que justifican sus bajezas. Y cuanto más daño hacen, llega esa pausa larga y poderosa que lanza el cielo para hacerle recordar a quien se deben y ante quien no pueden ofender ni existir para elegir serviles a usar y victimas para jugar.

Por tanto, abraza cada día tu poderosa conexión con Dios y sus ángeles, intercesores y no decaigas, deja el tiempo correr. Y cuando las hojas empiecen a caer, podrás sentir que la paz interior no te abandona, tu integridad es más fuerte y lo esperas todo solamente de la divinidad, porque nada es azar y cada quien vive lo que necesita, merece y le corresponde. 🧐
Manjari (Bendiciones)