Ten la amabilidad, ética y respeto de que si deseas compartir mi post, coloques que soy la autora, porque del cielo te ven, yo te veo y Saturno, también. 🧐😇🧚♀️🧚♀️🌙
Queridos amigos, cada planeta tiene aspectos positivos y negativos que corresponde aprender a reconocer para vivir de mejor manera. Y en el caso del planeta Neptuno, cuya casa es la constelación de Piscis, tiene como lado bueno, el interés por el arte, la pintura, el misticismo, la bondad para ayudar al prójimo, en especial, a los ancianos, la fe y el interés por el cine, la fotografía.
Neptuno es un planeta de tránsito lento e ingresó a su casa el año 2011 y se quedará allí hasta el año 2026, para luego pasar a la constelación de Aries. Sin embargo, cada que Neptuno ingresa en su propia casa, surgen pandemias, cambios climatológicos notorios y si echan memoria, los últimos años, se habló poderosamente acerca de las drogas sintéticas; siendo el lado negativo de un Neptuno que no se maneja, la decisión de evadir la realidad y caer en la fantasía
El lado oscuro de Neptuno son las adicciones de todo tipo, el postergar las metas, usar disfraces de conducta (tonos, formas, maneras de hablar) y si recuerdan, los últimos diez años, nos hemos topado, quienes somos docentes, con una variedad de tonitos extraños y poses raras en el paralenguaje (tono de voz) y el aumento de las muletillas, porque a Neptuno le fascina disfrazarse. Y cuando Neptuno ingresó a Piscis, llegó Tinder y otras salas de chat hot para cortejo, donde mandarse fotos de alto calibre sexual es la consigna; surgió también el “sexo virtual”, porque claro, a los atrapados en el lado oscuro de Neptuno, les fascina ser infieles por redes sociales, se crean varias, con diversas fotos y ese narcisismo de sentirse especiales los encierra en ese espejismo neptuniano. Neptuno mal aspectado no puede amar, porque necesita crearse historias diversas, placer latente, cambiante, narcótico total.
Y si recuerda, los últimos nueve años, se puso de moda “quiero ser fotógrafo” y veíamos a los adolescentes y jovencitos “alucinar” que son lo top de la fotografía sin tener ni un mes de estudios al respecto. Y si bien, pueden tener buen ojo, la carrera de fotografía, como todas, toma su tiempo, esfuerzo y necesidad de estudiar y practicar varios años.
Proliferaron las escuelas de fotografía, algunas, con costos impresionantes que no justificaban para nada esos silabos pobres (engaña muchachos, como decía mi abuela). Y también aparecen más películas y muchos productores que juntaron dinero se lanzaron al sueño “cine” y claro, eran fans de netflix, pero tampoco habían estudiado cine profesional (en la mayoría de los casos) y tenían un guionista destacado y se lanzaron al ruedo neptuniano con el sueño de ser cineastas.
De modo que ya se imaginan las películas que se vienen hasta el 2026; deben ser unas 50 sobre la pandemia, documentales trágicos y otros con ya el aroma de la era de Acuario por delante (futuristas, de ovnis) y claro, también de temas antes no tocados, en especial, los místicos.
Nunca imaginamos que jovencitos querían imitar a los jefes de las mafias del cártel de drogas y se tomaron fotos con pistolas, cuchillos y a full la era de los tatuajes y todo tan Neptuniado (modo personaje) y esto seguirá, porque «parecer» es el lado que vende el mismo demonio.
Vimos también que aviones cayeron al mar cuando Neptuno retrogradó (revisen noticias del 2010 fines hasta ahora) y también el submarino que explotó en el fondo del mar en Argentina y así, cosas de Neptuno que cuando hace tránsitos con otros planeta en mal ángulo, trae estos episodios.
Cuando Neptuno ingresó a Piscis se hablaron más de temas paranormales y claro, por cosas de la vida, me convocaron para ser Jurado en el programa “Psíquicos” (franquicia inglesa) y me lo pasé bomba entre cementerios, casas encantadas y viendo aterrados a mis amigos técnicos del canal y yo pensaba, cosas de Neptuno. Lo maravilloso es que aún estos años, se podrán recoger testimonios e imágenes reales de entidades y salen a flote grandes secretos para bien del hombre y del prójimo.
Hace tres años pude captar una entidad con mi dulce celular en Boyacá (Colombia), cuando fui invitada a visitar una casona que tenía cerca de 500 años, para un programa paranormal en ese país y que aparece en mi libro paranormal, “Presencias”, pero debo tener hasta la fecha, fotitos que les paran los pelos, pero es porque este tránsito Neptuniano, lo favorece. Por tanto, estos años, los fans de este género, imaginen que los fantasmitas se hacen más visibles y salen de lo oculto; no he investigado sobre Ufología (ovnis), pero estoy segura que mis amigos colegas que lo hacen, tendrán memorables grabaciones y contactos extraños.
Con Neptuno en Piscis surgió más interés por los temas vinculados a la mente (yoga), así como el estudio de oráculos y mancias que siguen fascinando a millones y en esas seguiremos, pero con mayores destapes interesantes y útiles para el hombre.
También notamos que aumentaros los grupos religiosos y de aquí en adelante, decir que se es ateo, puede aumentar y formar grupos de fanáticos religiosos, también, pero de eso, les cuento, otro día.
A nivel emocional, sugiero que se miren y se fijen si el lado oscuro de Neptuno los agarra de los pelos en lo siguiente: dejadez, doble moral, deshonestidad, mitomanía, adicciones, apego a redes sociales, dejar de ser auténtico.
Al ser especialista en lenguaje no verbal y tener poderosa influencia saturnina en mi carta natal, gracias a un pelito de Neptuno, tengo las antenas, pero realmente se las debo a Kirón (que lastimosamente no me permite devolvérselas) y bueno, cuando todos estos años observaba a mis alumnos o gente que se me acercaba en presentaciones de libros, consulta, en la calle, etc, se me iba el ojo saturnino y cotejaba esa influencia Neptuniana en quienes no son sólidos emocionalmente.
Por ejemplo: estos años, aumentó el disfuerzo para caminar, el modo de saludar de algunas damas haciendo muecas raras con la boca (jetita sensual) para la foto (tan neptuniano) y andar más sexy para que revolotear las hormonas de quienes desean conquistar. Cambió el cortejo: «En verdad, que pereza manyas, porque esta pandemia es demasiado alucinante y no lo puedo creer». 🙄🙄
Y en el caso de los varones, verlos caminar imitando a los metro sexuales, con el polito pegadito para mostrar su super brazo (de Gym) y paraditos junto al auto (para denotar poder); ego y pose a la carta, tan Neptunianos. Y al hablar, ámbos géneros (en miles de casos), una mezcla de tonitos de tv mexicana, con frases de moda en inglés. Porque ya les dije que Neptuno afecta la personalidad de quienes no la tienen, porque no se han cultivado y puede salir lo que sea de moda y se lo ponen, así no les quede.
Las fiestas electrónicas (Urano en su máxima potencia) van de la mano hasta hoy de modo oculto (en incontables) del consumo de drogas sintéticas, bebidas energizantes, porque Neptuno mal aspectado es “Evadir la realidad” y el parecer, hundiendo al ser
Gastar en celulares de precios insólitos, anhelar la zapatilla soñada que usa el jugador del equipo preferido de fútbol, obsesionarse con el auto más caro, imitar con las cirugías a un personaje mediático. Consumismo a la carta, deudas por placer; esto es Neptuno mal aspectado.
Sin embargo, Saturno entró en Capricornio (su casa diurna) a fines del 2017 e imaginen un Jefe el cielo enojado al máximo, con su tabla de errores que llamó a Plutón (transformador – destructor) para reunirse como los “Avengers”, solo que se les llama “Planetas maléficos mayores” y le dan tunda al capitalismo, grandes emporios y le demuestran al hombre que en tierras de paso cuenta ser humanitario y que el lado Neptuniano que debe prevalecer es aquel donde miramos a los ancianos con más amor, al prójimo con respeto y claro está, usamos la perfección como regalo (lo cual ocurre cuando más nos acercamos a las enseñanzas divinas)
Pero claro, tras el eclipse poderoso en Capricornio del 26 de diciembre del 2020 (con efecto de seis meses), donde se unió al baile de tanda celeste, el coloso Júpiter, imaginen a tres señores duros que tiran las sillas por todos lados y todo se derrumbó, estamos en esta etapa.
Saturno entró en Acuario (La humanidad) y nos encerró (Saturno rige los monasterios) y Plutón tiró abajo lo que quiso y lo seguirá haciendo a nivel instituciones hasta el año 2023, mientras que ahora, Saturno en Acuario (hasta el 2023), cuando llegue Júpiter a su ladito (a mediados del 2020 por un año), le exigirá al hombre “conciencia, humanidad, respeto”, pero con mucha ciencia de la buena, tecnología médica al servicio de lo correcto.
Y como Neptuno sigue en Piscis, los invito a luchar por salir de la piscina que busca evadir la realidad. La evades cuando no reconoces lo que enseña el creador, cuando solo piensas en ti mismo, cuando todo lo postergas en madurar y cultivarte, cuando esperas que la enfermedad te sorprenda para mirarte, cuando buscas atajos para no esforzarte, cuando esperas dar eternamente lástima antes que luchar paso a paso con el oficio que se te presente y puedas, cuando vives de apegos absurdos para destruirte, cuando no aportas y solo dañas donde pisas.
El lado malo de Neptuno es “mentirte”, justificar errores conscientes y echarle pimienta al “atontamiento mental” para quejarte de todo y morirte cada día, porque no puedes ir a un centro comercial por tu zapatilla de moda o lo que fuese que ahora, no es prioridad. No ser auténtico, imitar quien no eres, caer en deshonestidad, en necesidad de masajear el ego por poder y todo lo que suene a doble moral.
Y recuerden que cada cierto tiempo, de 30 a 35 años, Saturno y Plutón se juntan para destruir, transformar y hay quienes viven etapas como esta del mejor modo, porque han trabajado mucho en pisar la tierra y sobre todo, en los valores que enseña el creador.
Los dejo reflexionando y recuerden que Neptuno anda retrógrado y esto dura 5 meses. Cuidado con volver a la piscina de la evasión de la realidad, porque muchos, no podrán volver a la razón y Plutón no tiene miramiento, destruye lo que se le antoje y Saturno le pasa el cuadernito con las faltas.
Espero lo disfruten, aprendan un poquito y abran esos ojitos lindos que Dios les dio para “ver” la realidad.
Manjari (Bendiciones)
