Queridos amigos, el tema de hoy es “El miedo al fracaso” y va dedicado con mucho cariño para Lourdes, Alexia, Tomás y Roberto, quienes necesitan este post y me lo pidieron.
El temor es una emoción natural y no podemos vivir lejos de experimentarla, lo correcto es aprender a convivir con ella e impedir que aplaste las metas y sueños más importantes que tenemos para salir adelante. Por ello, desde Zéfiro veamos unos tips de cómo afrontarla.
1.- Si tienes reveses y fallidos intentos: Es posible que ocurra a nivel laboral, afectivo, familiar, etc y lo importante es identificar:
¿todo dependió de ti?, ¿eres consciente de que pusiste todo tu empeño y obraste de manera honesta?, ¿había gente que tenía otras expectativas y no tuvo empatía contigo?
Es muy importante que se hagan estas preguntas porque a menudo ante el fracaso inminente, la primera reacción es ira, fastidio y luego una depresión profunda y frases en la mente de un por qué y por qué, pero la evaluación del problema en conjunto en calma a veces no se hace y por ello miles de personas se quedan atolladas, no son capaces de actuar y modificar actitudes y reiniciar nuevos caminos y estrategias de vida.
2.- No puedes vivir lamentándote del pasado fallido por siempre: Si decides hacerlo, ese pesimismo te llevará desde ya a perder toda posibilidad y sino puedes cambiar de manera de pensar urge que busques ayuda profesional para cambiar tu manera de pensar y vencer la baja autoestima y poca voluntad que te invade.
El ayer fue ayer y siempre queda caminar, replantear, modificar errores y buscar nuevas soluciones. Entercarse sobre lo mismo no es correcto y solo genera más frustración.
3.- Me quedo con lo que tengo antes que arriesgar: esta es la condena del cobarde de vocación y también del que dejó de soñar y carece de fuerza interior. Se trata de personas que no evalúan sus talentos, que no saben potenciarlos y mucho menos tomar decisiones. Es gente que cree que ciertas vivencias solo les toca a gente con suerte o por ayuda y no es así siempre, todo cuesta mucho en esta vida y generalmente detrás de todo sueño cumplido no solo hay lucha, también cuotas de sacrificio, dolor y desencantos que se llevan con uno pero te recuerdan que valieron la pena por ver cumplida tu meta y anhelo.
4.- La flojera venenosa: Es camuflada como miedo al fracaso y tiene que ver con personas que no tienen ganas de esfuerzos especiales, si es así prefieren decir que temen, pero en el fondo no están acostumbradas ni a luchar ni a planificar nada en sus vidas porque se los han dado todo o porque quieren que otros les hagan la chamba. En esta vida es necesario ser metódico, ordenado y constante para ver los proyectos llegar a buen puerto.
Pretextitos como no se cómo empezar se deben asumir y pedir ayuda o guía, pero empezar ahora y no cuando ya sea tarde. Y para ello hay que aprender a crear, a pensar, a investigar, la flojera no permite nada de esto y habla de espíritus débiles y faltos de deseos de servir. Y sino estás enfermo mentalmente, la flojera se sacude como el polvo de los muebles con decisión y sin penas.
5.- Si te crees poca cosa: es también cuestión de actitud, de identificar tus valores y darte tu lugar como ser especial que eres y si necesitas que te lo digan y por ahora nadie lo hace, te queda esforzarte por hacer tus proyectos y metas o tomar cambios de vida con real sinceridad, sin esperar que los otros digan algo bueno o malo, lo importante es que sepas y admitas que das lo mejor de ti, con eso debe bastarte. No digo que el miedo se irá, pero al menos sabes que caminas a su lado y vas por lo que necesitas y quieres con fe en ti mismo. Si por ahí no arrancas, estamos para el tacho, no avanzamos.
Levántate y anota todos tus talentos, fíjate cuáles no has explorado y sabrás que Dios no hace basura y todos tenemos muchos muchos talentos, no uno, pero los usamos cuando nos provoca y la idea es usarlos siempre y divertirnos con ellos.
6.- Sino soportas un no: Siempre alguien alguna vez te dirá un “No” a un proyecto, pero recuerda que hay un no que puede volverse “si” cuando menos lo esperes y si lo mereces. Así que déjate de mieditos y échate los “No” que te dijeron antes al hombro y con dignidad sigue luchando, sigue arriesgando y si necesitas descansar un poco del dolor, ok, hazlo, pero no demasiado tiempo, solo lo suficiente para tomar impulso y no seas terco (a) y revisa si tus actitudes y convicciones son las correctas, si actúas con limpieza y sobre todo de buena fe, sin tales ingredientes mereces todas las negativas del mundo siempre.
7.- Sino perdiste la fe, el temor será tu amo: Así como lees, si dejas morir la fe en ti mismo y también en Dios (y sino eres creyente, fe en lo que es correcto y justo) te resultará más complicado asumir nuevos retos, nuevos sueños.
Siempre les haré recordar desde este blog que Dios jamás se olvida de ti, todos pueden fallar, pero él jamás y por ende aquellas personas que lo llevan muy dentro del corazón, arraigado y con fuerza tampoco. Gente con una fe viva y honesta siempre será quien esté a tu lado porque la fuerza del amor los mueve y cuando tengas una meta, verás como los ángeles te mandan ayuda, aliados y si te crees solo puede que por momentos sientas que así es, pero la esfera de lo místico actúa pronto y cada día tiene su rol y cada hora su función, así como cada personaje que llega a tu vida su cometido. Aprende a identificarlos y levántate cuantas veces sea necesario, así llores, duela , patalees, pero sigue porque vivir es corto y demasiado importante y cómo vivas depende solo de ti.
Ya lo saben Zeferinos, el miedo estará ahí, pero debemos aprender a domarlo, a adormecerlo, distraerlo y volverlo mudo mudo para que no paralice la vida. Decíde entrenarte en ello, busca dentro de tu alma lo mejor que llevas para dar y no vivas por vivir, deja huella con fuerza, déjala y camina, camina sin esperar nada de nadie, solo de Dios, eso no lo olvides jamás porque sufrir no solo es una situación, también es una elección.
Ahora les dejo esta melodía para que los acompañe y recuerden que siempre hay seres de luz velando por ustedes.
Bellísimo día para todos y que los dones del cielo desciendan sobre sus almas este día con tanta fuerza que los lleve a decidir ser más felices.
Manjarí (bendiciones)