Queridos amigos, el tema de hoy es “La importancia de los principios y convicciones” y va dedicado con mucho cariño para Mónica, Muriel, Andrés, Gabriel y David, quienes me pidieron este post hace unos días.
Se entiende por convicciones a todas aquellas ideas y creencias que se eligen tomar como ciertas porque se considera son veraces e importantes para el desarrollo de la personalidad y madurez. Mientras que los principios tienen que ver con las normas de conducta que el hombre desarrolla en base a los valores aprendidos e innatos.
No todas las personas son capaces de ser firmes en sus principios y convicciones, son cambiante, dubitativos (as) y manipulables, situación que interviene directamente con la desdicha o estados caóticos que luego experimentan. Por ello, desde Zéfiro veamos cómo mantenerlos y qué peligros existen para perderlos:
1.- La amenaza del ego y la ambición: Cuando las personas carecen en el fondo de una sólida autoestima y sus valores son endebles, los principios y convicciones quedan a un segundo plano. Hombres o mujeres dados por ejemplo al estilo de vida y básicamente pensar “ligth” viven preocupados por el qué dirán, por la competitividad y también por el consumismo.
Muchas veces, para lograr ser o alcanzar la imagen que desean desbaratan o pisan principios primordiales como la honestidad, la justicia y lealtad. Cuando las actitudes egoístas o temores se instalan en la mente como consejeros oscuros, no hay nada que hacer si decides escucharlos, serán capaces de mentir, de fingir, de ser desleales y de ser injustos porque importa solo el “YO” , ese que no sabe mirarse, que no sabe admitir fallas y asumirlas con humildad para enmendarlas y ser mejor.
En cualquier arista de la vida los que por ejemplo llevan la ambición a esferas que incluyen actos deplorables como la corrupción, chantajes, mentiras, etc van por la vida dañando a muchas personas, creyendo que no había otro camino, sin meditar en la consecuencias, en que en esta vida no es posible hacer algo malo sin que el ser supremo lo vea y el cosmos actue.
Si bien todos los seres humanos cometemos errores, los hay de diversos tipos y las personas que tienen altos estándares de vida a nivel de principios y valores saben ser tajantes y firmes cuando alguna situación en el camino o personas pretenden arrebatárselos o hacerlos dudar de lo que creen es correcto.
2.- La amenaza del placer y el egoísmo: Cuando la o las personas creen que tienen derecho a todo con tal de lograr sus objetivos y con ellos arrastran a otras personas al dañarlas, estamos frente a personas sin buenos principios.
Por lo general, el egoísmo es parte de la personalidad de gente que no fue bien encaminada o que al tener lesiones emocionales ante malas experiencias, sea en la esfera de la vida que fuese, no logran superarse y van por la vida “al desquite” y consideran que necesitan satisfacer caprichos, placeres y retos que se trazan para sentirse con la sensación de triunfo y poder.
Hay tantos tipos de ejemplos, pero los siguientes son los más comunes
– Personas que no saben compartir
– Personas que son incapaces de escuchar la necesidad de alguien
– Personas que evaden decir la verdad o lidiar con personas firmes de principios porque estorban a sus fines.
– Personas que usan la mentira como herramienta para lograr caprichos o arribar hacia lo que buscan de manera constante.
– Personas que jamás se pondrán a meditar sobre lo que necesita, siente, piensa o necesitan los otros o quienes le rodean o sobre quienes se acutúa de manera incorrecta.
– Personas que jamás saben decir “gracias” y muchos menos ser gentiles.
3.- La amenaza del deseo de venganza y obstinación: Cuando los individuos no son capaces de manejar el dolor, la desilusión, frustración o se creen los únicos seres del planeta señalados por malos momentos injustificados e inaceptables, pueden surgir secuelas emocionales terribles, las mismas que desdibujan la personalidad, la ensombrecen y vuelven a las personasoscuras.
Es así que cuando ello ocurre, millones de personas viven con un deseo de venganza oculto que no logran reconocer, el mismo que brota en las relaciones humanas y recae sobre quien menos lo imagina y tampoco lo merece.
Algunos ejemplos de los más comunes son:
– Personas que fueron maltratadas por sus jefes superiores que no logran entenderlo y superarlo. Luego de ello apenas tienen oportunidad de ascender y ocupar algún cargo importante desatan ira , irritabilidad y despotismo sobre sus empleados o personal a cargo.
– Personas que fueron engañadas o traicionadas a nivel afectivo y no logran superarlo pueden con el tiempo desatar un estilo de trato vengativo con la nueva pareja por temor, desquite y para sentir que se tiene todo manejado y jamás se volverá a ser traicionado. En ocasiones estas personas son quienes más desleales se vuelven y tienen relaciones afectivas desdichadas que se repiten.
– Personas que fueron maltratadas psicológicamente por sus progenitores y cuando son padres hacen lo mismo, dañando así a inocentes que nada de culpa tienen.
– Personas que se sintieron discriminadas o infravaloradas por alguien o grupos pasan a hacer lo mismo cuando sienten que tienen algún tipo de poder para ejercer sobre el resto .
Como vemos Zeferinos, mantener los principios y convicciones es una decisión y si es genuina no cuesta, es natural, solo brota y con ellas de aliadas se es capaz de decir “NO” a todo lo que no es sano, no es justo, no es noble y no es solidario.
Por principios como la dignidad las personas logran manejarse de manera juiciosa, alturada y prudente, sin dejarse maltratar y sin temer las consecuencias de decir lo justo y correcto en el momento que lo elijan.
Hoy tanta gente tiene problemas para mirarse, para detenerse a reflexionar sobre su manera de actuar y solo saben quejarse, lamentarse, maldecir y renegar de lo que son y lo que no aceptan del camino
Quienes actúan por convicción y principios, no temen decidir, no temen las oposiciones ni las críticas, no viven de apariencias, viven de lo que son, del darse para trascender. Llegar a comprender cómo vivir con madurez es un proceso que no todos afrontan igual , nadie dijo que sería fácil, nadie dijo que madurar no sería doloroso ni complejo, pero si se dijo que “la gente necia y pobre de espíritu camina rodeada de sombras y solo sabe quejarse y ser obstinada”
Caminar con la conciencia tranquila brinda esa paz que los se necesita para alcanzar la paz interior, esa que cuando escasea hace la vida más complicada y los caminos más duros de pasar. Nadie dijo que sería sencillo vivir, nadie dijo que sería solo sonrisas, pero si mantienen valores y principios hacia lo correcto, justo y bondadoso todo lo malo que les toque vivir pasará como los malos vientos para estar ubicados donde deben estar porque lo merecen, la ley causa efecto se cumple para los hombres de fe.
Los invito a meditar y luchar por mantener esos principios fuertes, infranqueables y mi consejo es “que no te tiemble la mano ni sientas temor de caminar de largo ante caminos oscuros porque todo pasa y tras la niebla siempre hay luz”
Y ahora les dejo esta cancioncita para que los alegre un poquitín y los acompañe.
Que tengan un extraordinario y reparador fin de semana y que los ángeles les envíen todos los mensajes que necesitan para protegerse de todo mal
Manjarí (bendiciones)