Queridos amigos, el tema de hoy es “Errores que deben evitar las madres con sus hijos ” y va dedicado a Giovanna, Violeta, Esperanza y Mónica, quienes esperan este post.
Si bien nadie nació sabiendo cómo ser padre y se aprende en el camino, es evidente que ser una mejor madre dependerá del nivel de inteligencia emocional, cultura, ecuanimidad y espiritualidad de las mismas.
Muchas mujeres tienen la idea de tener varios hijos y no se miran, resulta una meta cuantitativa, creen que es un deber para ser bien vistas socialmente y otras tienen la férrea idea que ser madre solo es tener alguien a quien cuidar, a quien proteger y ante tantas ideas confusas, terminan cometiendo errores que a la larga hacen mucho daño a sus hijos y a su matrimonio si lo tienen.
Veamos desde Zéfiro cuáles son los errores que por falta de cultura emocional e investigación cometen millones de madres hoy.
1.- Lo quiero todo para mi hijo, absolutamente todo lo que yo no tuve: El haber sentido que de pequeña no pudo tener acceso a cierto tipo de comodidades y oportunidades, así como traer grabado en la mente (insigths, estilos de vida, estereotipos) y estilos de felicidad hace que millones de mujeres tengan por consigna conseguir que sus hijos alcancen metas cuantitativas como por ejemplo:
– Mi hijos tiene que estudiar en el colegio más exclusivo de Lima (solo en uno así aprenderán y serán exitosos).
– Deben tener los mejores juguetes, ropa de marca y de moda para no ser discriminados en la escuela y para verse exitosos.
– Deben tener amistades importantes, integrar ciertos grupos sociales porque de no ser así, todo les costará mucho más.
Por lograrlo, muchas madres pierden las perspectivas y se pelean terriblemente con el esposo (conviviente) y sino trabajan la cosa se pone peor porque exigen, gritan, se vuelven intolerantes y amargadas y van destruyendo su relación de pareja. Otras prefieren que el esposo viva endeudado porque su idea es: es su deber, me tiene que dar lo mejor porque le di un hijo, etc. De tal modo que este tipo de madres se vuelven conflictivas y no son capaces de razonar ni hacer acuerdos sobre gastos equilibrados en pareja.
Otras de estas mujeres si trabajan, pero gastan todo su sueldo solo en sus hijos y no se ocupan de ellas mismas (ni en la salud como mínimo) y descuidan plenamente su relación de pareja, tal vez porque es una forma de evadir luchar por ellas mismas y crecer a nivel emocional.
Muchas madres tienen tantos gastos con sus hijos, pero comen fatal, no los vitaminan, no invierten en materiales para educarlos, no les leen, no les hablan seguido y los dejan a su suerte viendo televisión, videos o los tienen por horas interminables con profesores y cursos, pero no les preguntan cómo andan, no saben lo que sienten y los hijos terminan viéndolas como proveedoras de dinero, permiso y engreimiento para ellos decidir desde niños lo que les provoque.
Es importante recordar que muchos niños fueron a los mejores colegios y se los dieron todo, pero fueron creciendo caóticamente porque lo esencial, que es la comunicación con ellos, el cultivo emocional, los valores, la correcta corrección y el consejo a tiempo no llegó. Sus padres, y en especial muchas madres se empecinaron en darles todo lo que pedían, pero no les enseñaron a respetar, a luchar, a tener convicciones y lo esencial, a mirarse porque ellas tampoco lo hacen y todas su metas son cuantitativas. Y vienen bastante tarde a darse cuenta de sus errores y terminan con los hijos en problemas de todo tipo, el matrimonio destruido o que se mantiene por apariencias.
Recuerden que la buena educación es la que va combinada con las enseñanzas que se dan en el hogar y ser culto es un proceso que implica toda la motivación hacia aprender en el núcleo familiar, hacer que se vuelva un hábito por ejemplo el leer, investigar y mejor aún, que se vuelva en los hijos una necesidad para el espíritu y eso no necesariamente se cultiva en colegios A1 según las revistas.
2.- Sobre protección y ensimismamiento: Es otro error que cometen las madres sin cultura emocional, nerviosas o que en el fondo no quieren ocuparse más de ellas mismas y traen el autoestima por los suelos y por tanto es más sencillo ponerse como meta obsesionarse en todo lo que el hijo (hijos) hagan. Empiezan por darles solo la comida que les gusta (anulando así los alimentos que necesitan como verduras, pescados, etc), luego si lloran o gritan, les dan todo para que paren porque “es chiquito (a) y no soporta verlo así, olvidando que el niño aprende a manipular y es preciso corregirlo con amor, pero con determinación.
Otras madres son adictas a la compras y si el niño (a) pide un juguete de moda o lo que fuese, hacen lo que sea por complacerlos (compran menos comida en casa, se endeudan con tarjetas) y lo peor del asunto es que no meditan si el esposo tendrá para cubrirlo y ni se lo preguntan, son impulsivas e inconscientes, no saben decir “no” al niño (a) con explicaciones justas y sanas. Suelen ser las madres que todo lo prometen y cuando no pueden cumplirlo terminan por no ser respetadas por sus propios hijos y si un niño no respeta a su madre es porque no la admira y esta no se lo enseñó.
Algunas mamás no dejan que sus hijos socialicen mucho porque le temen a todo y con el tiempo estas criaturas crecen con muchos temores y cohibidos (as) y otras no les enseñan ni a tender su cama porque necesitan verlos siempre como bebes y les hablan como tal cuando han pasado décadas y son adultos.
3.- Sobre los niños manda “ella”, el esposo o pareja no pinta, no sabe: Algunas mujeres irracionales prefieren decir que su esposo es inútil o no sabe guiar a sus hijos solo porque no lo hace como “ella quiere” y anulan al padre en casi todo.
– Jamás lo dejan ir a comprar comida porque dicen que falla
– No sabe vestir a la criatura
– No sabe peinarlos
– No sabe enseñar
Estas mujercitas olvidan que eligieron al esposo y padre de sus hijos y como tal tiene derecho de estar todo el tiempo que pueda con sus hijos y puede aprender de todo con paciencia y a su modo y estilo, no tiene que ser el mismo que el de ellas. Como siempre digo: mientras estén seguros, limpios, bien alimentados, amados y guiados, no hay error y porque ponerse remilgosa ni especial con ellos porque tienen su forma y mis respetos para esos papas que son maravillosos, de gran paciencia, bondad y sobre todo inteligencia emocional.
Si una madre anula con sus comentarios al padre de sus hijos logra abrir una brecha entre ellos, logra que los niños no quieran hablar con él porque ella les repite todo el tiempo sus defectos y eso es un gran error porque no solo no respetarán a su padre, sino que en sus grandes problemas o dudas no lo buscarán y sabe Dios a que gente inadecuada les pedirán consejo.
4.- Como soy madre, me olvido de mí: Son estas mujeres que con el pretexto de no tener tiempo se descuidan totalmente de su salud física y emocional, así como de su relación de pareja. Y si por ejemplo ellas tienen algún problema de salud lo minimizan porque gastan fuerte en el hijo y no han armado un presupuesto que incluya la salud de ellas o van tarde al médico; muchas cuando es irremediable.
Otras madres no se arreglan porque solo piensan en todos los problemas que el niño tiene: Cosa que puede ocurrir por protegerlo en extremo como por el extremo de abandonarlo a su suerte
Y es que lo correcto debe ser que el niño (a) crezca aprendiendo independencia, a conocer sus talentos, estudie con reflexión y dicha, no con presión y fastidio. No es sencillo, pero sin duda implica un esfuerzo que en la medida que la madre es comprometida, ordenada y siempre entusiasta lo logra con su familia.
Para aquellas mujeres que son madres solteras o el padre de la criatura no lo visita la cosa se pone más dura si trabaja sola para manterlo, pero igual con orden, valores cimentados, mucho amor y esfuerzo logrará ser una madre en paz consigo misma y confidente de sus hijos (esencial para el apoyo de los mismos).
5.- Sino aprendes como te digo, tendrá que ser a la fuerza: Es otro terrible error que comenten mamas incultas que no saben observar el temperamento de su niño (a) y cuando no comprenden algo en el estudio le pegan, los gritan, los insultan, en general, los agreden emocionalmente. Les pasa a madres con hijos hiper activos o al revés, apáticos e introvertidos. Si hay ignorancia pasan a maltratar tanto a la criatura: prohibiéndole todo lo que le da alegría, comparándolo (a) con otros niños (as), marginándolo, evadiéndolo (a) porque no lo soportan y prefieren que los críen los abuelos o la nana.
Un tono de voz inadecuado de madre o padre, insultos y demás hacen un daño inmenso a los niños porque crecen inseguros, incapaces de tomar decisiones, nerviosos, rebeldes, intolerantes, etc, pero solo con los años y la factura de los errores estas madres aprenden a reconocer sus errores y cuando quieren hacer mejor las cosas, por no escuchar antes buenos consejos se les fue la oportunidad y sus hijos no la escuchan ni respetan.
6.- Madres light : Muchas de ellas son las que suelo llamar de manera algo sarcástica “las chiqui viejas” porque temen atrozmente a la decrepitud física y son más mujeres que madres, se la pasan solo metidas en la peluquería, gimnasio, chismorreo telefónico, neuróticas pensando que el esposo las engaña o buscando pareja como locas si las dejaron, etc etc etc. Estas señoras son archi prácticas en todo y con “dinero” deben solucionarlo todo porque pensar demasiado las agota, se desesperan, no pueden ni tiene interés de leer algo para sus hijos o si les cuesta reniegan a morir y siempre buscan que las ayuden porque solas con su hijo o hijos entran en crisis de nervios, mal humor, etc. El problema con muchas de ellas es que son dependientes afectivas y jamás recibieron tratamiento y tienen bajísima autoestima afectiva, de apariencia y profesional.
Cada mujer tiene dones y cualidades maravillosas que debe aprender a explorar y mucho más cuando es mamá y si bien puede que no sea un as en todo (nadie lo es) debe hacer lo posible por cumplir su rol con inteligencia, autenticidad, valores, fuerza, constancia, alegría, empuje y sobre todo paciencia y fe.
Aprendan a ser mujeres seguras antes de decidir ese bello rol, no tengan nenes por impulso, por presión, tengan uno porque saben que harán lo mejor posible sin quejarse y sin olvidarse de crecer siempre a nivel emocional. Y si ya son mamás ayuden a su hijo (s) a ser seguros y enséñenles a manejar el miedo porque si solo lo sobre protegen contribuyen a que ciertos talentos jamás se desarrollen y sean muy inseguros, cultiven sus valores, el deseo de aprender y servir y sobre todo conversen mucho con ellos de todo, no los abandonen en lo principal que es empujarlos a ser ellos mismos con fe.
Y si cometen errores con ellos pídanles perdón y enséñenles a hacer lo mismo porque los hombres más sabios son aquellos que no temen aprender de sus desaciertos y han salido del fracaso hacia el éxito con humildad y voluntad.
No olviden informarse, leer sobre todo lo que sus niños necesitan, no compren ningún juguete ni monada sino saben cómo funciona y sus consecuencias, no sean madres consumistas de la masa, sean auténticas y originales y para lograrlo es preciso que se cultiven porque la educación no termina en la escuela o los centros superiores, es toda la vida para quienes asumen que hasta tener facultades es hermoso estudiar y ser mejor para compartir el conocimiento.
Ahora les dejo esta hermosa canción a todas las mujeres que alguna vez fueron niñas y necesitan sanar algo por dentro. Espero les agrade y acompañe
.
Que tengan un bello día y los ángeles guíen a todas las madres y mujeres que cumplen este rol con talentos, paciencia, creatividad y mucha paciencia para hacer las cosas lo mejor posible.
Manjarí (bendiciones)